Síntomas de falla comunes:
Rendimiento de enfriamiento anormal:
- Flujo de aire reducido y temperaturas más bajas de lo habitual (incluso congelación), lo que da como resultado una baja eficiencia de enfriamiento.
- Fallo total del enfriamiento o caída de temperatura extremadamente lenta.
Olores y fugas inusuales:
- Detección de olores a refrigerante o aceite refrigerante en el interior del vehículo.
- Fuga de líquido (por ejemplo, tinte fluorescente o refrigerante) del tubo de drenaje del evaporador.
Problemas mecánicos y operativos:
- Compresor funcionando continuamente bajo alta carga con ruidos perceptibles o sonidos anormales.
- Manchas de aceite visibles, acumulación de carbón, deformación o corrosión en la superficie del evaporador.
Métodos de prueba:
Inspección inicial:
- Inspección visual: Verifique si hay grietas, corrosión o fugas en el evaporador.
- Evaluación de la temperatura: Mida la temperatura en las rejillas de ventilación del aire acondicionado. Una desviación significativa del rango normal (por ejemplo, inferior a 10 °C y un flujo de aire débil) puede indicar congelación o bloqueo del evaporador.
Herramientas de diagnóstico profesionales:
- Prueba de tinte fluorescente: inyecte tinte fluorescente en el sistema refrigerante y observe las fugas a través del tubo de drenaje bajo luz ultravioleta.
- Detector de flúor: utilice un detector de fugas en los respiraderos; una alarma señala una fuga de refrigerante.
- Prueba de presión: Mida la presión del sistema con un manómetro; una presión anormal en el lado bajo puede indicar bloqueos o daños.
- Prueba de fugas: después de quitar el evaporador, aplique presión y sumérjalo en agua para verificar si hay fugas de aire.
Factores adicionales a considerar:
- Comportamiento del compresor: Los ciclos frecuentes o el funcionamiento continuo sin un enfriamiento efectivo pueden indicar sensores de temperatura del evaporador defectuosos.
- Rendimiento del vehículo: Los problemas graves del evaporador pueden estar relacionados con una menor potencia del motor o un mayor consumo de combustible debido a una carga excesiva del compresor.
nota: Si aparecen síntomas, comience con comprobaciones visuales y de temperatura, y luego confirme las fallas mediante pruebas de presión o con tinte fluorescente. La reparación oportuna es fundamental para evitar daños en el compresor o una falla completa del sistema de aire acondicionado.
